La peregrinación jacobea tuvo gran fama en toda la Europa medieval. Escandinavos, flamencos, ingleses, escoceses e irlandeses utilizaban las rutas marítimas con gran intensidad para llegar a Ribadeo, Viveiro, Ferrol o A Coruña con la intención de peregrinar a Santiago. Estos dos últimos enclaves costeros, gracias a su excepcional ubicación estratégica, son los puntos de partida de las dos alternativas del Camino Inglés. La ruta A Coruña-Santiago tiene 74 km; los tramos Ferrol-Santiago suman 118 km.
ITINERARIO
Partiendo de Ferrol, el Camino Inglés se inicia en los muelles de Curuxeiras hacia la localidad de Narón, continúa hasta enlazar con la carretera de O Salto, pasa por el molino de mareas de As Aceas de Lembeie y cruza el puente sobre el río Xubia para entrar en Neda.
Dejamos atrás a Neda para continuar hasta entrar en Fene. Saliendo de la ciudad, la ruta enlaza con el camino real para llegar a Cabanas, en plena ría del Eume, el peregrino puede descansar en la playa de A Madalena, antes de continuar por el paseo marítimo, cruzar el puente y entrar en Pontedeume.
Dejando atrás Pontedeume llegamos a una iglesia desde la que se divisa una excelente panorámica sobre las rías de Ferrol, Betanzos y Ares continuando hacia la aldea de Buíña hasta Miño.
La carretera desciende y comienza de nuevo un ascenso hacia Matacabalos, pasando por Chantada y Guende. La carretera discurre por un terreno llano antes de descender hacia Betanzos, una ruta que ofrece una buena panorámica de la ría de Betanzos y sus marismas.
El peregrino cruza el río Mandeo en A Ponte Vella y entra en Betanzos, la antigua capital de una de las siete provincias del Reino de Galicia, a través de las puertas de la muralla medieval.
Desde Betanzos llegamos a Coruña, salimos de la ciudad hacia el puente de Sigüeiro sobre el río Tambre donde el peregrino entra en el municipio de Santiago. La ruta sigue paralela al río y continúa hasta la llamada «Fonte do Inglés» y deja atrás la zona industrial de Tambre.
La ruta se adentra en el centro urbano de Santiago, pasando por delante del edificio administrativo de la Xunta de Galicia, en San Caetano, y del monumento al peregrino, representado por una emotiva estatua de bronce del escultor José María Acuña.
Una vez visitada la Catedral de Santiago de Compostela, punto de llegada y encuentro de los peregrinos, la ciudad de Santiago se ofrece al visitante en todo su esplendor histórico, en toda su diversidad y dinamismo actuales.
Una vez superado el puente de Sigüeiro sobre el Tambre, el peregrino entra en el municipio de Santiago. La ruta sigue paralela al río y conduce a la iglesia de Barciela; continúa hasta la llamada «Fonte do Inglés» y deja atrás la zona industrial de Tambre pasando por la carretera de Galileo y la calle Tambre. La ruta llega a Meixonfrío, donde había una posada en la que se refrescaban los peregrinos y viajeros.